martes

POR LOS RINCONES


Que cómo está
el pobrecillo
con su pitillo
medio apagado,
tan amargado
tan pobrecillo...
vende alegría
vende ilusiones
en los cupones
de lotería.
Sé que al dormir
sus ojos yertos
sueñan despiertos
el sueño incierto
de las delicias
de tus caricias...
tú le donaste
y le quitaste
el mismo día
tu compañía.
Y por los rincones
yo sé que aun te nombra por ver
si al fin tú quisiste volver
de nuevo a sus sombras...
Y por los rincones
yo sé que aun te nombra por ver
si al fin tú quisiste volver
de nuevo a sus sombras.
Que cómo está...
pues él existe
donde le viste,
en una esquina
nadie adivina
lo que le hiciste...
sigue apoyado
contra ese muro
y yo te juro
que lo has matado.
No pienses que
voy a pedirte
que en vez de irte
vayas a verle
para ofrecerle
lo que le diste...
sé que otro día
le dejarías
y eso sería
mucho más triste.
Y por los rincones
yo sé que aun te nombra por ver
si al fin tú quisiste volver
de nuevo a sus sombras...
Y por los rincones
yo sé que aun te nombra por ver
si al fin tú quisiste volver
de nuevo a sus sombras.

domingo

TE QUISE


Te quise en las sombras
y a los cuatro vientos
te quise y lo grito,
te quise en silencio,
te quise callado
te quise sereno
te quise y me extraño
de tanto te quiero...
te quise como agua
como Sol y viento,
cuando cae la tarde,
cuando el día es nuevo,
cuando cae la lluvia
cuando lloro y pienso
que fueron tus manos...
salvación a tiempo.

Con la misma fuerza
con que ayer te quise
con esa locura
con que conseguiste
atarte y atarme
dulces ataduras,
te quise inexperta
te quise madura...
te quise y al día
que tuve la suerte
de encontrar tus ojos
con los míos de frente,
te quise en mis brazos
gracias a ti fuertes,
te quise en la vida...
te querré en la muerte.

Te quise por todo
pan de cada día,
quise tu tristeza
igual que tu risa,
tus manos, tus ojos,
tu boca encendida
el pecho anhelante
de fuego prendida...
te quise cuando hablas
te quise callada
la mirada fija
la sonrisa clara,
te quise y lo sabes
y yo lo presiento
que si ayer te quise...
te querré ya viejo.

Con la misma fuerza
con que ayer te quise
con esa locura
con que conseguiste
atarte y atarme
dulces ataduras,
te quise inexperta
te quise madura...
te quise y al día
que tuve la suerte
de encontrar tus ojos
con los míos de frente,
te quise en mis brazos
gracias a ti fuertes,
te quise en la vida...
te querré en la muerte.