miércoles

HABIA LLEGADO LA TRISTEZA


Se había agotado la alegría,
se había agostado la belleza
y aquella mañana presentía
que había llegado la tristeza.

Se había gastado la energía,
se había esfumado la firmeza
y había una gris melancolía
abriéndole el paso a la tristeza.

Había llegado la tristeza
había llegado la tristeza,
abría la puerta y me traía
la mueca grotesca del dolor...

había llegado la tristeza
había llegado la tristeza,
abría la puerta y pretendía
pintarme de negro el corazón.

Se había deshecho la armonía
se había quebrado la entereza,
se había secado la poesía
y había menguado la nobleza.

Se había agotado la alegría,
se había agostado la belleza
y aquella mañana presentía
que había llegado la tristeza.

Había llegado la tristeza
había llegado la tristeza,
abría la puerta y me traía
la mueca grotesca del dolor...

había llegado la tristeza
había llegado la tristeza,
abría la puerta y pretendía
pintarme de negro el corazón.

Había llegado la tristeza
había llegado la tristeza,
abría la puerta y me traía
la mueca grotesca del dolor...

había llegado la tristeza
había llegado la tristeza,
abría la puerta y pretendía
pintarme de negro el corazón.


sábado

¡OH PAPÁ!


Querida niña:
te escribo esta carta para decirte...

que aún es muy pronto
para volver,
que aunque quisiera
no puede ser,
y es que no sabes
que es el amor
de los mayores
mucho peor
que el de tú y yo.

"¡Oh papá, oh papá,
por qué no vienes
si ya es tiempo de la Navidad,
oh papá, oh papá,
tú no comprendes
que más sola que yo está mamá!."

Quizá en la Primavera, cuando...

bajen las rosas
a tu portal,
te hablen las olas
de mi lugar,
muera mi orgullo,
nazca mi fe,
eche al olvido
lo que sufrí,
vuelva a por ti...

"¡Oh papá, oh papá,
por qué no vienes
si ya es tiempo de la Navidad,
oh papá, oh papá,
tú no comprendes
que más sola que yo está mamá!."

"¡Oh papá, oh papá,
por qué no vienes
si ya es tiempo de la Navidad,
oh papá, oh papá,
tú no comprendes
que más sola que yo está mamá!."

"¡Oh papá, oh papá!...

miércoles

LOS OLVIDADOS


Cerraron la tapa
crujió la madera
al echar la capa
de gruesa tiniebla...
el cura, una vieja
y el sepulturero
fueron la compaña
del mísero entierro.

Las hojas que vuelan
cayendo la tarde,
el olor de tierra
a tumba que se abre
y en el gran cortejo
de los olvidados
entró el pobre viejo,
entró el pobre viejo
miedoso y cansado.

Ni siquiera un nombre
registra la losa,
aquel pobre hombre
fue tan poca cosa
que toda su vida
quedó en un momento
borrada y perdida
y rota en el tiempo.

Y yo me pregunto
qué fue de aquel hombre
que ahora, sin nombre,
se pudre en la tierra,
que bajo dos piedras
desnudas y frías
a la tierra envía
a la tierra envía
lo que es de la tierra.

Qué fue de tu vida,
cuál fueron tus sueños,
cuáles tus mentiras
y tus pensamientos,
qué amores tuviste,
cuál fue tu trabajo
antes de morirte
y hundirte allá abajo.

Mas sé que tus cosas
son como las mías,
hagas lo que hagas,
vivas como vivas,
andar y de viejos,
miedosos, cansados,
entrar al cortejo
entrar al cortejo
de los olvidados.

martes

SI YA NO TE ACUERDAS

Si ya no te acuerdas
de aquellos momentos
en que eras mi fuerza
mi cálido aliento,
si ya no te acuerdas
no entiendo el por qué
llenabas de besos
mis sueños de ayer.

Si ya no te acuerdas
de aquellos momentos en qué fuiste mía,
si ya no te acuerdas
de aquel dulce Invierno de miel y de Sol...
si ya no te acuerdas
que yo era tu dueño que tú eras mi vida,
quizá fuera un sueño
aquel dulce Invierno de miel y de Sol.

Si ya no te acuerdas
de que fuiste mía
con toda tu fuerza
con toda tu vida,
si ya no te acuerdas
hoy debes saber
que aquellas mentiras
mataron mi fe.

Si ya no te acuerdas
de aquellos momentos en que fuiste mía,
si ya no te acuerdas
de aquel dulce Invierno de miel y de Sol...
si ya no te acuerdas
que yo era tu dueño que tú eras mi vida,
quizá fuera un sueño
aquel dulce Invierno de miel y de Sol.

Si ya no te acuerdas
de aquellos momentos en que fuiste mía,
si ya no te acuerdas
de aquel dulce Invierno de miel y de Sol...
si ya no te acuerdas
que yo era tu dueño que tú eras mi vida,
quizá fuera un sueño
aquel dulce Invierno de miel y de Sol.

jueves

ENGÁÑAME OTRA VEZ


No digas dónde vas
no lo quiero saber,
aunque comprenderás
lo puedo suponer,
prefiero aguantar,
prefiero compartir
a no verte ya más
y quedarme sin ti.

Enciende mi pasión
engáñame otra vez,
desata el corazón
con ese o con aquel,
que aquí te espero yo
igual que un perro fiel
después de que el amor
lo hagas en brazos de él.

Y tú regresarás
y es fácil de saber
que quieres algo más
que te puedo ofrecer,
es tanto lo que das,
eres tanta mujer
que un hombre nada más
no te puede valer.

Enciende mi pasión
engáñame otra vez,
desata el corazón
con ese o con aquel,
que aquí te espero yo
igual que un perro fiel
después de que el amor
lo hagas en brazos de él...

enciende mi pasión
engáñame otra vez,
desata el corazón
con ese o con aquel,
que aquí te espero yo
igual que un perro fiel
después de que el amor
lo hagas en brazos de él.